
Durante el fin de semana, se conoció una grave denuncia presentada por Gonzalo Montiel y su familia contra su ex abogado, Nicolás Payarola, a quien acusan de haberlos estafado por una suma estimada en casi 700 mil dólares.
Según la denuncia judicial presentada hace un año atrás -hoy con falta de mérito- y los documentos, Payarola habría montado una serie de maniobras fraudulentas para ganarse la confianza del futbolista y su entorno. Una vez dentro del círculo íntimo del jugador de River y la Selección Argentina, comenzó a solicitar fondos para supuestos emprendimientos e inversiones, muchas de ellas inexistentes o sin sustento legal.
Del defensor legal al centro de una estafa
Payarola se acercó a la familia Montiel en marzo de 2023, recomendado por un conocido, para defender a Gonzalo en una denuncia por presunto abuso sexual. “No conocíamos abogados penalistas, pues nunca nadie de nuestra familia había transitado por una denuncia falsa como la que sufría por ese entonces Gonzalo”, explicaron Juan Marcelo Tito Montiel y Jacqueline Aguirre, padre y hermana del jugador.
Al poco tiempo, el abogado se ganó su confianza y supo que planeaban invertir en la construcción de un barrio cerrado en Ezeiza. Payarola se ofreció para liderar el proyecto, creando la sociedad “M&A Desarrollos Inmobiliarios” junto a los Montiel. Fue entonces cuando comenzaron los reiterados pedidos de dinero, entre ellos una inversión en “dólar MEP” que resultó ser “un sinsentido”, según expresaron los denunciantes.
Certificaciones falsas y firmas adulteradas
La familia comenzó a sospechar en septiembre de 2023. Los pedidos de dinero eran cada vez más frecuentes y difíciles de justificar, y las explicaciones del abogado ya no cerraban.
En julio, Payarola había solicitado 200 mil dólares para una supuesta seña de un terreno. Aseguró haber tenido una reunión el 18 de julio con el vendedor —identificado como FGF—, pero el propio FGF declaró que recién conoció a Payarola en agosto, lo que demuestra que la reunión nunca existió. Un chat de diciembre entre ambos confirma que el vendedor aún preguntaba por la seña cinco meses después.
Mientras los Montiel viajaban a Inglaterra entre el 22 de septiembre y el 9 de octubre de 2023, Payarola falsificó documentos y firmas sin autorización, con la ayuda del contador Héctor Corgo. Entre ellos, una certificación de ingresos del 5 de octubre por $11.800.000, y otra al día siguiente por $25.000.000, ambas para presentar ante el Banco Santander.
Según la denuncia, la firma de Jacqueline Aguirre fue falsificada mientras ella estaba en el exterior. “La firma no tiene absolutamente nada que ver con la de Jacqueline”, aseguraron, y presentaron los pasajes que confirman que estaba fuera del país cuando se firmaron esos documentos.
Más documentos adulterados y devolución parcial del dinero
La familia también denunció que Payarola entregó un documento falso en febrero de 2024, donde aseguraba que los 200 mil dólares estaban “caucionados en la cuenta de ‘Campos de La Virgen de Luján’”, firma de Sergio Occhiuzzo, también denunciado. Luego, el propio contador Corgo confirmó que su firma fue adulterada en ese instrumento.
Chats, audios y una reunión clave
Entre noviembre y marzo, los Montiel insistieron en recuperar el dinero. Aportaron mensajes de WhatsApp y un extenso audio de una reunión que Tito Montiel mantuvo con Payarola el 11 de marzo de 2024, grabación que ya fue incorporada a la causa.
En esos chats, el abogado reconoce que debe devolver dinero, pero pretende que sea menos del monto reclamado. Alterna entre excusas, promesas y momentos de enojo: “Quiero mi plata”, le exige Tito de manera tajante.
Si bien Payarola devolvió pequeñas sumas, no se acercan a los montos exigidos. En marzo de 2024, ya había sido desplazado como defensor de Gonzalo Montiel, siendo reemplazado por Daniel Rubinovich y Rafael Sal Lari, quienes lograron el sobreseimiento en la causa por abuso y ahora encabezan la denuncia contra Payarola, junto a Franco Catroppa y Sergio Occhiuzzo.